Escogido va por el 3-0 ante unos Gigantes contra la pared

Toros y Águilas se juegan el segundo puesto en Santiago

El Round Robin de la pelota invernal dominicana apenas comienza, pero la tensión ya se siente como si fuera la recta final. Este lunes, la semifinal presenta dos escenarios claros: un Escogido que quiere seguir marcando el paso y unos Gigantes obligados a reaccionar, mientras Toros y Águilas protagonizan un choque directo que puede mover el standing desde temprano.

En San Francisco de Macorís, los Leones del Escogido salen al terreno del Estadio Julián Javier con marca perfecta de 2-0 y la mira puesta en un arranque de 3-0 que los colocaría en una posición envidiable. El conjunto rojo ha sabido jugar con inteligencia esta etapa, ganando partidos cerrados, ejecutando bien en los momentos clave y apoyándose en un pitcheo que ha respondido cuando más se necesita.

Más allá de los números, el Escogido transmite calma. No se ha visto desesperado ni siquiera cuando los juegos se aprietan. Su ofensiva ha sido oportuna y el bullpen ha hecho el trabajo para cerrar las puertas. En un Round Robin corto, ese tipo de béisbol suele marcar la diferencia.

Del otro lado están los Gigantes del Cibao, que llegan con récord de 0-2 y sin margen para errores. Un tercer revés consecutivo complicaría seriamente sus aspiraciones de llegar a la final. La urgencia es total. En los primeros dos encuentros, la novena nordestana ha dejado corredores en base y ha sufrido en los innings finales, dos fallas que no se pueden repetir en una instancia como esta.

Jugar en casa puede ser el punto de apoyo. Con el respaldo de su público, los Gigantes necesitan un juego más agresivo, mejor ejecución con hombres en posición anotadora y mayor firmeza desde el relevo. Hoy no hay espacio para esperar que las cosas se acomoden solas.

Mientras tanto, en Santiago, las Águilas Cibaeñas reciben a los Toros del Este a las 7:30 de la noche en un duelo que vale más que una simple victoria. Ambos equipos llegan igualados con récord de 1-1, lo que convierte el choque en una pelea directa por el segundo lugar del standing.

Los Toros han mostrado una identidad clara: pitcheo sólido, juegos cerrados y mucha disciplina. Son un equipo incómodo, que no regala outs y sabe competir en escenarios de presión. Las Águilas, por su parte, confían en su experiencia y en el empuje del Estadio Cibao, donde suelen crecerse en partidos importantes.

Para los amarillos, la clave estará en producir a tiempo y evitar que el relevo vuelva a ser un dolor de cabeza. Para los Toros, mantener el juego cerrado y aprovechar cualquier error puede inclinar la balanza.

La jornada de este lunes puede empezar a abrir una brecha o apretar aún más la clasificación. En un Round Robin sin descanso, cada out cuenta y cada derrota pesa. A partir de las 7:00 p.m., el país vuelve a girar alrededor del diamante.