Denuncian que el Zoodom manipula datos; son plagas costosas de Puerto Rico

Científicos alertan sobre riesgo de traer especies de la vecina isla.

Santo Domingo. – Lejos de calmarse, la controversia por la intención del Zoológico Nacional (Zoodom) de importar animales desde Puerto Rico ha subido de tono. La Comisión de Ciencias Naturales de la Academia de Ciencias y la Comisión Ambiental de la UASD emitieron este martes una dura advertencia conjunta: traer esas especies al país es abrirle la puerta a un desastre ecológico similar al que ya sufren los boricuas.

En un comunicado que no se anda con rodeos, ambas instituciones acusaron a las autoridades del Zoodom de mantener una campaña de desinformación. Según los expertos, el director del parque ha intentado minimizar el problema alegando que las culebras solicitadas "no son venenosas", un argumento que los científicos califican de irrelevante y distracto.

“El problema no es el veneno, es la capacidad invasora”, sostienen los académicos. El argumento central es que los animales que el Zoodom pretende ingresar son, en su lugar de origen, plagas agresivas que han desbordado la capacidad de control de las autoridades de Puerto Rico.

Un problema ajeno que podría ser nuestro

La realidad en la isla vecina, según describen las comisiones, es crítica. Las autoridades ambientales puertorriqueñas están invirtiendo recursos humanos y económicos masivos para capturar y retirar estos ejemplares de la vida silvestre, debido a que se reproducen sin control, afectando la agricultura, la fauna nativa y hasta la salud humana.

Lo que Puerto Rico describe como una crisis de manejo por incapacidad de albergue, aquí se estaría vendiendo como una adquisición. “Si estas especies llegan a escapar al medio natural en nuestro país, corremos la misma suerte que Puerto Rico”, sentenciaron los expertos, advirtiendo sobre la fragilidad de los ecosistemas insulares ante depredadores introducidos.

¿Donación o pedido?

Otro punto álgido del conflicto es el origen del trámite. Mientras el Zoológico habla de una donación, la Academia de Ciencias y la UASD sacaron a relucir un cable de la agencia EFE fechado el 23 de octubre. El documento, aseguran, prueba que fue el propio director del Zoodom quien solicitó los animales, desmintiendo la narrativa de que se trata de un simple regalo recibido pasivamente.

Para los científicos, la insistencia de las autoridades puertorriqueñas en enviar los animales responde a una necesidad logística de deshacerse de un excedente problemático que ya no pueden costear ni manejar.

Llamado a la precaución

Ante este panorama, las instituciones hicieron un llamado directo al Ministerio de Medio Ambiente y al Departamento de Sanidad Animal de Agricultura. Exigen que se active el “principio de precaución” que establece la Ley 64-00.

La solicitud es clara: congelar cualquier permiso de importación y priorizar la seguridad biológica de la República Dominicana antes de asumir riesgos innecesarios con especies que, a pocos kilómetros de distancia, ya han demostrado ser un enemigo costoso para el equilibrio natural.