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Feminicidios en 2024: casi 50.000 víctimas en todo el mundo

| | 3 min read
En 2024, 46 feminicidios se han registrado hasta el momento, un descenso significativo frente a los 70 en 2020, 86 en el 2021, mientras que en el 2022 ocurrieron 63 y en el 2023 otros 65 según revela el reporte preliminar de este año

La ONU alerta que el hogar sigue siendo el lugar más peligroso

Casi 50.000 mujeres y niñas fueron asesinadas en 2024 en crímenes de feminicidio en todo el mundo. El dato, publicado por ONU Mujeres y la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, vuelve a situar la violencia machista en el centro del debate internacional. El promedio diario impresiona: 137 víctimas al día. Y el escenario más letal es el espacio que debería ser el más seguro. Seis de cada diez murieron a manos de su pareja o de un familiar.

Las cifras globales muestran una ligera reducción frente a la estimación de 2023, aunque los organismos aclaran que no se debe a un avance real sino a la falta de datos completos en algunos países. La violencia que atraviesa a mujeres y niñas sigue presente en todas las regiones sin excepción.

África aparece como la zona con más casos en términos absolutos, con unas 22.600 víctimas dentro de la esfera íntima o familiar. Su tasa es también la más alta, con tres asesinatos por cada 100.000 mujeres. En las Américas y Oceanía el impacto es igualmente grave, con tasas que superan el 1 por cada 100.000. Asia y Europa presentan cifras más bajas, pero los expertos advierten que no reflejan toda la realidad debido a la escasa información sobre feminicidios cometidos fuera del ámbito privado.

En Europa y América, la mayoría de los asesinatos cometidos en el hogar se perpetran por parejas sentimentales. En 2024 fueron el 64 por ciento de los casos en Europa y el 69 por ciento en América. La ONU insiste en que la prevención debe centrarse en esta relación de cercanía, donde el riesgo es mayor y donde muchos países aún no cuentan con sistemas eficaces de detección temprana.

El informe recuerda que el hogar es el entorno más peligroso para mujeres y niñas, mientras que en el caso de los hombres, la mayoría de los homicidios ocurren fuera del ámbito doméstico. Solo el 11 por ciento de los hombres asesinados murieron a manos de parejas o familiares, una diferencia que revela la dimensión específica de la violencia contra las mujeres.

Los organismos subrayan que los feminicidios casi nunca son hechos aislados. Suelen ser el final de un historial de agresiones previas. Una de cada cuatro mujeres entre 15 y 49 años ha sufrido violencia física o sexual por parte de su pareja actual o pasada. Entre los factores de riesgo más comunes figuran amenazas previas, episodios de estrangulamiento, acoso, ruptura reciente, consumo de alcohol u otras sustancias y situaciones de estrés prolongado.

Para frenar esta realidad, varios países han impulsado medidas que van desde cambios legales hasta campañas públicas y la creación de unidades especializadas. En América Latina se han adoptado leyes que tipifican el feminicidio como delito específico. Otros países lo consideran una agravante. Movimientos como Ni una menos o Me Too han contribuido a ampliar la atención social sobre el problema.

El informe concluye que la prevención pasa por políticas claras, educación afectiva y sistemas de apoyo que actúen antes de que la violencia escale. Sin datos fiables y acciones sostenidas, el avance será limitado. El desafío sigue abierto y exige compromisos firmes desde los gobiernos, la justicia y la sociedad.

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