Desmantelan transformador ilegal millonario al pelotero Alfonso Soriano 

El expelotero pagaba 7 mil pesos por un consumo real de 160 mil.

La Empresa Distribuidora de Electricidad del Este (Edeeste) ejecutó un operativo que terminó con el desmantelamiento de un transformador exclusivo instalado de forma ilegal para alimentar las propiedades del expelotero de Grandes Ligas, Alfonso Soriano.

Lo que comenzó hace años como dos simples contratos residenciales para casas de familia, terminó convirtiéndose en un esquema de evasión eléctrica a gran escala, acuerdo a la empresa. 

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Según los informes técnicos, una de las viviendas de Soriano fue ampliada hasta transformarse en una mansión de lujo, mientras que la otra pasó a ser un edificio comercial que hoy alberga un gimnasio de alta demanda energética y otros locales. Sin embargo, en los registros de la distribuidora, ambos inmuebles seguían figurando como pequeños consumos domésticos.

El truco del transformador "privado"

Para sostener semejante estructura sin que saltaran los plomos, el cliente instaló por su cuenta un transformador de 50 kVA conectado directamente a la red de media tensión. Todo esto se hizo sin permisos, sin planos aprobados y, por supuesto, sin pasar por caja. 

El desfase en las cuentas es escandaloso pues mientras las propiedades pagaban unos 7,000 pesos mensuales, el consumo real proyectado —que ronda los 14,000 kilovatios hora— debería haber generado una factura cercana a los 160,000 pesos.

Esta maniobra le costaba al sistema eléctrico aproximadamente 1.8 millones de pesos al año. Ante la evidencia, y tras agotar las evaluaciones de ingeniería y normas técnicas, Edeeste procedió al corte y retiro del equipo bajo la mirada de abogados y notarios, asegurando que no se trate de una medida arbitraria, sino del cumplimiento de la ley.

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Un municipio bajo la lupa

El caso de Soriano no es un hecho aislado. Se produce en medio de una ofensiva de Edeeste en San Pedro de Macorís, una provincia donde las pérdidas eléctricas alcanzan un alarmante 80 %. 

La empresa ha denunciado que normalizar el servicio en Quisqueya ha sido una tarea titánica, no solo por el fraude técnico, sino por la resistencia de actores políticos locales que intentan frenar los operativos. 

En la zona son frecuentes los ataques a brigadas y la destrucción de medidores nuevos.

Mientras algunos intentan politizar la regularización del servicio, la distribuidora dice mantener vigilancia permanente en la zona para evitar que el transformador ilegal vuelva a "aparecer" de la noche a la mañana.