Presidente Abinader se reúne con el Episcopado dominicano

El presidente compartió un almuerzo con la cúpula católica para afianzar el trabajo conjunto por el bienestar social.

SANTO DOMINGO. – El presidente Luis Abinader reforzó los puentes entre el Palacio Nacional y la Iglesia Católica con un almuerzo este viernes junto a los miembros de la Conferencia del Episcopado Dominicano (CED). El encuentro, realizado en la Casa Arquidiocesana María de la Altagracia, no solo fue un gesto de cortesía, sino un espacio diseñado para seguir tejiendo acuerdos que impulsen acciones en favor del bienestar social del país.

El jefe de Estado fue recibido de manera cálida en la Casa Arquidiocesana. Monseñor Manuel Ruiz, obispo de la nueva Diócesis Stella Maris, y el padre Israel Craviotto, rector del recinto, fungieron como anfitriones. La bienvenida más emotiva, sin embargo, corrió a cargo de un coro de hermanas de la comunidad, quienes ofrecieron al mandatario un canto especial de acogida.

Un pedido de oración y agradecimiento

Tras el recibimiento, el presidente Abinader tomó la palabra para agradecer profundamente el gesto de las religiosas. Su breve intervención se centró en la importancia de la fe y el apoyo espiritual para la difícil tarea de gobernar.

“No puede haber mejor bienvenida, muchísimas gracias, que Dios las bendiga. Y yo sí quiero pedirles que me tengan en sus oraciones, cada una de ustedes, con Dios, a mí y a toda la familia, para poder trabajar en favor del pueblo dominicano, que es lo que hacemos cada minuto, cada día, cada hora, si tenemos esas oraciones, nos ayuda mucho más”, expresó el mandatario con notable sencillez.

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El mensaje fue directo y humano: la gestión de gobierno, que exige un esfuerzo constante, se ve fortalecida por la bendición y la súplica de la comunidad religiosa, demostrando la alta valoración que el presidente otorga a la guía moral y el respaldo de la Iglesia.

La cúpula al completo

El almuerzo congregó a la más alta jerarquía eclesiástica del país, destacando el peso institucional del encuentro. Entre los asistentes se encontraba el nuncio apostólico en Santo Domingo, monseñor Piergiorgio Bertoldi, lo que elevó la estatura diplomática de la reunión.

También estuvieron presentes los arzobispos de las principales sedes: monseñor Héctor Rafael Rodríguez (Santiago) y monseñor Tomás Morel Diplán (Santo Domingo). La lista de asistentes abarcó prácticamente la totalidad del Episcopado, incluyendo a los obispos de La Altagracia, Puerto Plata, Barahona, San Pedro de Macorís, San Juan de la Maguana y San Francisco de Macorís.

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La presencia de monseñor Faustino Burgos Brisman, monseñor José Amable Durán Tineo y otros distinguidos miembros de la Iglesia, confirmó el carácter central de este diálogo, el cual reafirma el compromiso de la administración de Abinader de trabajar de la mano con las instituciones que tienen una incidencia directa en la vida social y espiritual de los dominicanos.

Monseñor Francisco Ozoria Acosta

El Arzobispo Metropolitano de Santo Domingo, Monseñor Francisco Ozoria Acosta, no estuvo presente en el almuerzo con el presidente Luis Abinader porque, poco antes de la actividad, la Santa Sede le había retirado sus principales facultades de gobierno y administración de la Arquidiócesis.

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Aunque Monseñor Ozoria conservaba el título honorífico de Arzobispo Metropolitano de Santo Domingo, el Vaticano nombró a un arzobispo coadjutor, Monseñor Tomás Morel Diplán, con "facultades especiales" para asumir la gestión económica, financiera, del clero y del personal eclesiástico.

De hecho, en la lista de asistentes a la reunión con el presidente Abinader sí figura Monseñor Tomás Morel Diplán, lo que indica que él ya estaba asumiendo el rol activo de la Arquidiócesis de Santo Domingo.