Skip to content

Por fin, un nuevo código penal

| | 4 min read
Euri Cabral

 Todo apunta a que en en esta ocasión las cosas serán diferentes y se aprobará.

La pasada semana el senado de la República aprobó en primera lectura, de forma unánime, el nuevo código penal que regulará de ahora en adelante el ejercicio de la justicia en nuestra nación. En la legislación aprobada se dejan fueras las tres causales, frenando de esta forma el intento de algunos sectores de querer legalizar el aborto bajo esos alegatos.

 Desde hace más de veinte años se han realizado ingentes esfuerzos en el Congreso Nacional para aprobar este nuevo código. A pesar de que se habían presentado anteproyectos muy modernos y actualizados, siempre el tema de las tres causales era el obstáculo para que no se aprobara o, en caso de ser aprobado, que el presidente de turno lo objetara, debido a las protestas de algunos sectores y de la embajada de los Estados Unidos, que impulsaban la aprobación subrepticia del aborto encubierto en las tres causales, a pesar de que eso viola la constitución de la República.

 Todo apunta a que en en esta ocasión las cosas serán diferentes y se aprobará, por fin, el nuevo código penal. Existen dos condiciones muy especiales que nos llevan a hacer esa afirmación. La primera es que, fruto de un acertado trabajo del presidente de la Cámara de Diputados, Alfredo Pacheco, y el presidente del Senado, Ricardo De los Santos, la mayoría de los legisladores de los tres partidos principales entendieron que lo más conveniente es que se apruebe el código sin las causales y que ese tema sea discutido más adelante en otra ley definida para el caso.

 La segunda condición especial es que en esta oportunidad, fruto de la posición que tiene el gobierno de Donald Trump ante la agenda LGTB y el aborto, la embajada de Estados Unidos no está ejerciendo presión, ni está haciendo lobby ante los legisladores, para lograr que se apruebe el código con las tres causales incluidas. Sin la presión de la embajada estadounidense nuestros legisladores tienen toda la libertad de actuar en base en su conciencia civíca y su convicción cristiana, defendiendo la vida desde “la concepción hasta la muerte”, tal y como establece la constitución dominicana en su artículo 37.

A pesar de las críticas de los defensores del aborto, el nuevo código penal tiene una gran cantidad de elementos nuevos y de mucha significación, que ayudan a darle más eficacia a lucha en contra de la delincuencia y la criminalidad. Un elemento novedoso es que se incluyen setenta y dos nuevos delitos que no estaban en el código viejo, como son los delitos informáticos, el sicariato, el acoso cibérnetico, el engaño vía tecnológica, los delitos que se cometen vía las redes sociales, y muchos más. De igual manera se incluye el cúmulo de penas, lo que permitirá que quien cometa varios delitos pueda ser condenado acumulándole las penas hasta un máximo de 60 años, y no de solo 30 años como es en la actualidad.

De igual manera, el nuevo código penal establece un aumento significativo para délitos como los feminicidios, la agresión sexual, los daños con sustancias químicas y otros, estableciendo penas que pueden alcanzar hasta los 40 años en prisión.También se castiga con penas más severas la explotación sexual y la utilización de menores en actividades sexuales a cambio de dinero. 

El nuevo código penal es un gran esfuerzo que busca adecuar nuestro sistema de justicia a los adelantos tecnológicos, a los desafíos de los tiempos y a la nueva realidad que vive el mundo. El asunto de que se hayan sacado las tres causales no puede continuar siendo un obstáculo para evitar su aprobación. Ya en el pasado hemos vivido dos momentos frustrantes con Leonel Fernández y Danilo Medina, quienes siendo presidentes de la Republica, objetaron el cógido aprobado por el congreso en el 2006 y 2016, respectivamente, por el asunto de las tres causales.

El presidente Luis Abinader ha dicho que de manera personal apoya las tres causales, pero también ha expresado que ese tema divide la sociedad y ha evitado que se apruebe un nuevo código penal. Partiendo de ese criterio y de cómo el liderazgo del PRM en el congreso ha manejado este tema, estamos convencidos que en esta ocasión, cuando el senado y la cámara de diputados aprueben el nuevo código penal sin las tres causales, el presidente Luis Abinader no va a dejarse chantajear ni presionar, y no va a cometer el error de Leonel y Danilo. Si actúa con sentido de la historia, el presidente Abinader no va a observar la ley que da sustento al código penal y de esa manera se crecerá en su imagen de estadista.

Euri Cabral

Economista y Comunicador

euricabral07@gmail.com

Share:
Euri Cabral

Euri Cabral

Es un comunicador dominicano con una amplia trayectoria en diversos medios. Ha sido colaborador de los periódicos Listin Diario, El Caribe, Hoy, El Nacional, La Noticia y El Nuevo Diario. En la actualidad es comentarista del programa radial "EL Sol de la Mañana", el más importante programa de opinión del país que se transmite diariamente por la emisora Zol 106.5 FM. Es propietario de la empresa Producciones Ella y El y del canal de televisión Señales TV, un canal para sembrar valores. Ha publicado los libros "Duarte, un hombre de fe y de acción"(2013), "Merengue y Bachata: Orígenes, etapas y líderes" (2009), "Juan Luis Guerra y 4-40: Merengue y Bachata a ritmo de poesía y compromiso"(2008), "Amor de mariposas y otros relatos" (2002), "Fernando Villalona en su justa dimensión" y "Enseñanzas de Jiménes-Grullón"(1982). Desde el año 1987 está felizmente casado con Zinayda Rodríguez con quien ha procreado dos hijas: Amelia y Cheizi Cabral Rodríguez. Es un abuelo orgulloso de dos nietos: Ianna Amelie y Juan Fernando Cuello Cabral. En julio del 2004 asumió a Jesús como su Señor y Salvador y en estos diez años su vida ha sido transformada grandemente. En la actualidad forma parte del equipo de liderazgo de la Iglesia Cristiana Palabras de Vida (ICPV), que dirigen los pastores Raffy Paz y María Isabel Palacio.

Artículos relacionados

Columnistas

Me duele el alma

Mientras existan sociedades que permitan la libre expresión del pensamiento a casi TODOS, las que niegan ese derecho seguirán gritando en campos desiertos. Es doloroso…

| 3 min read