Dos militares condenados por asesinato de Víctor Jara se fugan en Chile

Los oficiales retirados del Ejército, Raúl Jofré González y Nelson Haase Mazzei, han escapado tras conocerse su condena. 

La Policía de Investigaciones de Chile (PDI) ha confirmado la fuga de dos de los siete militares condenados por el asesinato del icónico cantautor Víctor Jara durante el golpe de Estado liderado por Augusto Pinochet en 1973.

Los oficiales retirados del Ejército, Raúl Jofré González y Nelson Haase Mazzei, han escapado tras conocerse su condena, recoge Europa Press. 

La sentencia de la Segunda Sala de la Corte Suprema chilena dictaminó 25 años de prisión para los militares por los cargos de secuestro calificado y homicidio calificado de Víctor Jara.

Jara fue una figura prominente de la música chilena y simpatizante de las ideas de izquierda del presidente Salvador Allende, derrocado por Pinochet.

El día siguiente a la lectura del veredicto, la Fiscalía Oriente confirmó el suicidio de Hernán Chacón Soto, uno de los siete condenados. 

Jara fue una figura prominente de la música chilena y simpatizante de las ideas de izquierda del presidente Salvador Allende, derrocado por Pinochet.

Chacón, al enterarse de su condena, optó por tomar un arma y quitarse la vida cuando los agentes de la Brigada de Derechos Humanos de la PDI se presentaron en su domicilio para llevarlo a la cárcel de Punta Peuco, donde debería cumplir su pena.

La sentencia reafirmó la condena previa de la Corte de Apelaciones de Santiago, que sentenció a los siete militares a penas de 15 años y un día de prisión como autores de los homicidios del artista chileno.

Además, se les impuso una pena de 10 años y un día de prisión como autores de los secuestros calificados de Víctor Jara y del director de prisiones en ese momento, Littré Abraham Quiroga Carvajal.

Rolando Melo Silva, otro oficial involucrado, fue condenado a cinco años y un día de prisión como encubridor de los homicidios y los secuestros, y a tres años y un día de prisión como encubridor de los secuestros